Hacer una excursión al Rinjani es prácticamente obligatorio si visitáis la isla de Lombok o incluso si estáis en Bali y os gusta el excursionismo.
¿Cómo llegar al Monte Rinjani?
Desde Bali tendréis que ir hasta Padang Bay, cerca de la Blue Lagoon, al este de la isla, dónde hay un ferri público para llegar a Lombok. Desde allí podéis ir tanto a Bangsal como a Lembar. Yo recomiendo ir a Bangsal que fue el lugar donde yo fui, y no tuve ningún problema. Una vez en Bangsal encontraréis mil maneras de llegar al Rinjani. Comparad, hablad con la gente y quedaros con la mejor opción. No cojáis la excursión al Rinjani antes de llegar Sembalum o Senaru. Allí es dónde se puede coger la excursión de dos noches y tres días.
Nosotros al ser tanta gente queríamos hacer la excursión por nuestra cuenta y alquilar el material necesario como la tienda de campaña y los sacos de dormir. Empezamos a ir agencia por agencia y casa por casa a preguntar por este material. Llegó un punto en el que encontramos un lugar (casa-agencia) donde nos alquilaban todo. Cuando nos dijeron el precio nos quedamos sorprendidos. Era caro, después de habernos pasado más de una hora regateando.
Finalmente nos dijeron que por un poco más nos proporcionaban una excursión guiada. Nos proporcionaban todo el material, nos lo cargaban y nos daban comida. Los tres días, dos noches nos costó unos 50 euros por persona. Muchísimo menos de los que nos pedían al principio. Por eso siempre recomiendo lo mismo. Hay que buscar y buscar.
El único problema fue que empezamos la excursión sobre las 11 de la mañana. Este atraso nos hizo llegar arriba prácticamente de noche. El primer día, si salimos de Sembalum, habrá que subir un desnivel de más de 1000 metros, que puede ser duro para los que no estéis acostumbrados. Se sube desde el pueblo por caminos bien marcados. No hay que escalar en ningún momento. La dificultad de la excursión es la cantidad de horas, pero no el camino en sí.
El primer día llegaréis prácticamente al cráter. Pero no os daréis cuenta hasta el segundo día por la mañana. Otro dato a destacar son las lluvias. Nosotros fuimos en el mes de mayo y nos llovió el primer y el segundo día. No llueve durante todo el día. La lluvia se concentra al mediodía y es bastante torrencial. Os tendréis que poner a cubierto. Los chicos que os llevarán la tienda y los sacos de dormir van muy cargados. A veces no podrán más y os pedirán que los ayudéis. Nosotros no tuvimos ningún problema. Tenéis que ser conscientes que están sometidos a una carga de trabajo muy elevad.
Comienzo de la excursión
El segundo día os levantaréis cerca del cráter y diez minutos después de empezar empezaréis a ver el lago al fondo del cráter. Es una de las imágenes más bonitas que veréis en toda la excursión.
Una vez contemplado el cráter desde arriba, toca bajar al lago. El camino es bastante selvático y empinado. Yo me quedé flipando con los guías y los porteadores que eran capaces de hacer todo el trayecto en chanclas. Una verdadera locura.
Al mediodía llegaréis al lago. Allí veréis el riachuelo que llega. Como siempre, al mediodía lloverá bastante. Nosotros pensábamos que no iba a parar y continuamos el camino lloviendo. Un minuto después de empezar el viaje, dejó de llover. Una de las joyas escondidas de la excursión al Rinjani son unas termas que hay al lado del riachuelo. El agua sale muy caliente y es una buena opción para relajarte antes de empezar a subir.
Termas naturales Rinjani
Lago visto desde el borde del cráter
Después de cenar empezaréis a subir. Ya no habrá más bajadas. El desnivel es importante ya que tendréis que llegar al último campamento, a unos 2600 metros de altura. Una vez allí, solo queda comerse el bol de fideos y a dormir.
Por la mañana el tercer día hay que subir 1000 metros en unas 3 horas. Hay que levantarse a las 3 de la mañana para estar arriba al amanecer. El camino hasta llegar es muy duro, no solo por el desnivel sino que también por el tipo de terreno. El terreno es volcánico con mucha gravilla y por cada dos pasos que das retrocedes uno. Además es de noche así que no olvidéis llevar una linterna.
Una vez arriba las vistas son increíbles y no os arrepentiréis de todo el esfuerzo que habéis hecho. Veréis el mar al fondo y un sol radiante. Aunque haga sol, arriba te congelas de frío.
Amanecer en la cima del Rinjani
Con nuestro guía en la cima
Campamento base de la segunda noche
Por último, una vez acabado el amanecer, solo hay que deslizarse hacia abajo. La gravilla ahora es una aliada y te hará pasártelo bomba mientras bajas. Una vez en el campamento base, aprovecha para comer un poco, mear, cagar y a bajar.
El camino de bajada es empinado pero si eres joven y/o atlético puedes hacer muchos tramos corriendo. Al final del todo acabaréis en unos campos preciosos y os vendrá a recoger un coche, que os llevará a vuestro lugar de partida.
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