¿No sabes qué ver en Estambul? La ciudad más grande de Turquía , y de Europa, ejemplifica la transición entre Occidente y Oriente. Todas las culturas que se han establecido en esta ciudad han dejado su granito de arena, haciéndola imposible de visitar detalladamente. Nosotros estuvimos en esta ciudad 12 días, para verlo todo y daros la mejor información. En este post encontraréis el TOP 7 más completo sobre qué ver en Estambul.
SANTA SOFÍA Y MEZQUITA AZUL
Por su importancia histórica y cultural, cuando pensamos en qué ver en Estambul, no nos podemos olvidar de estos dos grandes edificios. Un edifico enfrente del otro, no vale la pena separarlo en la lista ya que si vienes a ver uno vas a acabar viendo los dos. Más aun teniendo en cuenta que la Mezquita Azul es gratuita. Eso sí asegúrate que vas cuando no sea hora de rezo.
Santa Sofía es un edificio enorme que ha pasado por multitud de reformas. Por fuera ya da la sensación de edificio de lego. Esto es por las numerosas reformas a las que se ha visto sometida por el hecho de estar construida sobre otras dos iglesias anteriores y por haberse convertido posteriormente en una mezquita. Hoy en día es un museo.
En el interior de Santa Sofía nos damos cuenta de la majestuosidad del edificio. Este edificio ha servido de lugar de culto de algunos de los emperadores más importantes de la historia de la humanidad.
Una curiosidad de Santa Sofía es que estuvo construida mirando hacia Jerusalén, con un estilo de iglesia Ortodoxa Griega. Una vez el Imperio Otomano conquistó la ciudad y la convirtió en mezquita, el rezo tenía que darse mirando a la Meca. Es por eso que todos los detalles musulmanes están orientados hacia esta última ciudad. Este hecho produce una asimetría que causa confusión.
La entrada a Santa Sofía vale 72 TR, un poco cara pero es seguramente el edificio más importante de la ciudad.
Cuando nosotros fuimos a la mezquita azul, casi toda ella estaba en restauración y la verdad es que no pudimos disfrutar de ella como nos hubiese gustado. El edificio es muy bonito y está claro que vale la pena entrar. La entrada es gratuita así que no os lo penséis dos veces y entrad.
Santa Sofía Estambul, preciosa pero llena de gente. Es la zona más visitada de la ciudad
PALACIO TOPKAPI
Este palacio otomano es amplio y lujoso. Paseando por sus jardines y salas enormes te puedes imaginar la vida de aquellos emperadores, que construían por capricho y para conmemorar victorias y aniversarios.
El palacio vale la pena visitar, aunque el precio sea parecido al de Santa Sofía, no solo por su majestuosidad, sino por sus vistas al Bósforo y a toda la ciudad. Nosotros que no somos mucho de palacios ni museos, disfrutamos de un par de horas en este complejo.
Un consejo a la hora de planear tus visitas en Estambul. No intentes visitar el palacio Topkapi, Santa Sofía, la mezquita azul y la Basílica Cisterna el mismo día por muy cerca que estén entre sí. Todos estos edificios merecen una visita sosegada. Cuando se visita mucho en poco tiempo, dejamos de disfrutar. Al final acabamos hasta el/la **** de tanta cultura. En todos hay mucho que ver. Nosotros hicimos mezquita azul y Santa Sofía una mañana y el palacio y la Basílica Cisterna otro día.
GRAN BAZAR Y BAZAR DE LAS ESPECIAS
Los dos bazares más famosos de la ciudad. Lugares perfectos para hacer unas compras de suvenires y reírnos con los trabajadores que intentarán captar tu atención de las maneras más divertidas. Para nuestra sorpresa, la mayoría de dependientes hablan algo de español, suficiente para convencerte de que compres sus productos.
Los dos bazares son muy diferentes. El bazar de las especias es pequeño, cuenta con dos calles, que le dan una forma de “L”. En la intersección de los dos bazares está la mezquita del bazar, donde rezaban antiguamente antes de abrir las puertas del complejo comercial. En este bazar encontraremos especias, tés y dulces típicos turcos.
Este bazar es mucho más grande que el de las especias, es realmente impresionante. Perderse por sus infinitas calles es obligado si vas a Estambul. En el Gran Bazar de Estambul podemos encontrar mucha más variedad de productos. Puedes encontrar desde falsificaciones hasta delicias turcas, pasando por cachimbas (o nargile como le llaman en Turquía) o vestidos tradicionales turcos y teterías. A nosotros nos impresionó y lo recomendamos, no importa el tumulto turista.
Gran bazar de Estambul. Imposible no perderte por este laberinto.
DISFRUTAR DEL BÓSFORO
Nosotros somos unos fans de las cosas gratis. Como buenos catalanes y mochileros, eso de gastar no es lo nuestro. Y la verdad es que en Estambul hay mil planes que se pueden hacer sin gastar ni una lira. Uno de ellos es pasearse y re-pasearse por el Bósforo.
Nosotros tuvimos la suerte de alojarnos en el barrio de Arnavutkoy, es lo que tiene tener amigos locales. Este barrio pertenece al distrito de Besikas, uno de los centros de la ciudad, al que se puede llegar muy fácilmente en transporte público. Desde Besikatas podéis coger un autobús hasta Arnavutkoy y empezar a andar. En vuestro recorrido disfrutaréis de los puentes de la ciudad y veréis barrios que en el pasado eran pueblos de pescadores. También encontraréis una de las fortalezas más importantes de la historia de la ciudad, Rumeli Hisari. Desde esta fortaleza el imperio Otomano conquistó lo que era entonces la ciudad de Constantinopla.
Para disfrutar del Bósforo hay que obviamente coger algún ferri que otro, tanto para cruzar de Europa a Asia y viceversa como para dirigiros al norte, hacia zonas como Sariyer. Los ferris valen 2,60 TR (Unos 0,40€).
Si tenéis suerte con el tiempo y vais en verano, os recomendamos que os bañéis en el Bósforo. Tened cuidado, hay bastantes medusas y corrientes muy fuertes. A pesar de esto, el agua está muy limpia y veréis las medusas con suficiente antelación como para huir. Recomendamos que os bañéis donde veáis otras personas bañándose, hay mucho hombre mayor turco bronceándose por la zona.
Rumelihisari Estambul, la fortaleza con la que los otomanos conquistaron la ciudad
COMER, COMER Y COMER
Imaginaros si imprescindible disfrutar de la comida de Estambul que hemos preparado un artículo dedicado exclusivamente a este tema. Aquí os dejamos el enlace.
DAR UNA OPORTUNIDAD AL LADO ASIÁTICO O ANATÓLICO
Muchos de los barrios más populares de Estambul están en la parte asiática de la ciudad. Algunos de estos barrios son Moda o Kadikoy. Kadikoy en concreto es uno de los barrios más jóvenes de Estambul y uno de los que tiene la mejor vida nocturna. Piérdete por las calles, tómate una cerveza en uno de sus numerosos bares o acércate al mar y disfruta del paseo marítimo.
La mayoría de los turistas se quedan solamente con el lado europeo pero Estambul es una ciudad de 15 millones de habitantes, ver solo el lado europeo limita mucho tu conocimiento de la ciudad. Esta guía sobre qué ver en Estambul os anima a cruzar de continente, para pasear por el paseo marítimo, comer en Moda o ir de compras a la calle Bagdad.
Paseo marítimo de Estambul en el lado asiático. Ideal para pasear y disfrutar de un día soleado.
LAVARTE EN UN HAMAM
Una tradición turca que en nuestra opinión hay que probar es lavarse en un baño turco. Muchos de los locales os dirán que es antihigiénico y que ellos nunca lo harían. Otros tienen la costumbre de darse un baño de este tipo muy a menudo. Las opiniones son muchas pero la verdad que nunca sabrás la tuya hasta que no lo pruebes. Si estaás cansado de tanto turisteo, ya sabes qué ver en Estambul para despejar tu mente.
Las mujeres y los hombres se separan. Los hombres solo son lavados por hombres y las mujeres por mujeres, tenemos que recordar que estamos en un país de tradición musulmana. Como curiosidad deciros que los hombres son mucho más pudorosos que las mujeres. Mientras que en la sección femenina las mujeres van prácticamente en pelotas, en la masculina los hombres no se quitan la toalla de encima.
Nosotros fuimos a un baño con historia llamado Kadirga Hamami. Este hamam mantiene la arquitectura original del año de su construcción, 1734. Muchos otros hamams se han reinventado para satisfacer las demandas más pijas de los turistas. Este en cambio no, y podrás disfrutar aquí del auténtico hamam.
Recién salidos del hamam en Estambul, ¡Qué relax!
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