Pasar dos días en Verona es suficiente para darse cuenta de su envergadura cultural. Castillos, iglesias y puentes son algunos de sus encantos. En esta ciudad, además, tuvimos la oportunidad de alojarnos en el centro. Estuvimos en el barrio de San Zeno, al oeste del río Adige. Desde aquí se puede ir perfectamente a cualquier lugar de la ciudad andando.
Nos alojamos gracias a la App CouchSurfing en casa de una profesora de profesores. Se dedicaba a enseñar a anglófonos cómo enseñar su lengua. Super interesante para nosotros que nos apasiona la educación.
Río Adige, a su paso por el barrio de San Zeno
Antigua pescadería reconvertida en supermercado. Vale la pena entrar.
Curiosidades de Verona
Julia, como se llamaba nuestra anfitriona también nos contó alguna curiosidad:
- ¿Sabías que Shakespeare nunca pisó la ciudad? Simplemente basó su obra en esta bonita ciudad al ver pinturas y oír leyendas. Romeo y Julieta nunca existieron. Entonces os preguntaréis, ¿Cómo puede ser que se sepa cuáles son sus balcones? Había dos familias con los mismos apellidos que usó Shakespeare para Romeo y Julieta. Capuleto para Julieta y Montesco para Romeo. Una historia curiosa.Hoy “la casa de Julieta” es muy popular y está llena de gente. Es muy popular, además, dejar notas enganchadas en el muro de la entrada y tocarle la teta a la estatua de Julieta.La casa de Romeo en cambio no está abierta al público y nadie va a visitarla por fuera. En esta casa podréis ver el balcón famoso de Romeo.
Balcón de Julieta en Verona
Balcón de Romeo en Verona
- El puente más antiguo de la ciudad es el Puente di Pietra. Es de la época romana, el único que queda de esta época en la ciudad. Si lo cruzamos vemos unas escaleras al otro lado de la calle. Por ahí se sube al Castello San Felice.
- Durante la época de carnaval se hacen actividades. Mucha gente se disfraza y hacen bailes típicos. Nosotros nos encontramos un desfile en el famoso Puente di Pietra.
Disfraces típicos del carnaval de Verona
Ciudad de Verona vista desde el Castello de San Felice
Castello San Felice
Pasado el Puente di Pietra, es visita obligada subir hasta el Castello San Felice. Desde allí se tienen las mejores vistas a la ciudad. Nosotros además conocimos a tres argentinos viajeros con los que compartimos experiencias. Dar una vuelta una vuelta por los jardines se agradece después de todo un día de piedra y cemento. Si estáis dos días en Verona os da tiempo de sobra.
Coliseo Arena de Verona
La Arena de Verona es probablemente el monumento emblema de la ciudad. Está super bien conservado y aún a día de hoy continua teniendo actividad de espectáculos. Simplemente el hecho de verlo por fuera vale la pena. Es lo que hicimos nosotros.
¿Alguna recomendación gastronómica?
Bar Mandorla, Verona
La verdad es que durante los dos días en Verona, para ahorrar, cocinamos nuestra propia comida. Igualmente, un lugar que os recomiendo visitar es el bar Mandorla. Está cerca del Arena romana. Ahí no os podéis perder el vino de almendras (Por solo 1,50€). Es dulce y sabe bastante a almendra cruda. A nosotros nos gustó. El local es, además, regentado por gente joven y la clientela es muy variada.
¿Cómo salir de la ciudad en autostop?
Para salir de la ciudad en autostop hay que coger el autobús 160 hasta Sommacampaga. Este pueblo está tocando a la autopista. Simplemente caminad hasta el área de servicio más próxima. Saltad la valla y a conocer a algún conductor que vaya a vuestro destino. Nosotros lo usamos para ir hasta Venecia. Más información sobre el trayecto de Verona a Venecia aquí.
